Marrakech con niños
Marrakech es una ciudad que enamora por igual a adultos y niños. Es un destino exótico y cercano para familias aventureras que deseen realizar un viaje lleno de emociones y disfrutar de un sinfín de actividades originales y autóctonas.
Un paseo en dromedario por el Palmeral de Marrakech
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Una actividad que siempre llama la atención de los más pequeños. Subirse o ver de cerca uno de estos mágicos animales resultará inolvidable para ellos.
Los curtidores
de Marrakech
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Aunque visitar los talleres de estos históricos artesanos puede despertar cierta incomodidad a sus olfatos (subsanado con un poco de menta cerca de la nariz), pero admirar en directo la belleza de su trabajo es una visita casi obligada.
La plaza
Jemaa el Fna
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Visita imprescindible para toda la familia. El lugar donde conviven magos, cuentacuentos y malabaristas… Allí los niños se sentirán como en un cuento de “Las mil y una noches” donde cualquier cosa puede ocurrir.
Picnic en los
Jardines de Menara
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Un escenario lleno de magia y belleza para disfrutar de un día al aire libre rodeados por los olivares de esta zona, con sus preciosas vistas a la cordillera del Atlas, y degustando algunas de las deliciosas recetas locales.
Talleres de cocina marroquí y cerámica
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En un enclave privilegiado, entre olivos, se encuentra el Beldi Country Club, un pequeño hotel de 30 habitaciones que, además de un encanto especial, ofrece la posibilidad de disfrutar de originales talleres pensados para los más pequeños.