Abierto en 1886, este hotel fue el alojamiento de artistas, escritores y actores destacados de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Actualmente, el Gran Hotel Inglés ha sido renovado para adaptarlo a las necesidades de hoy en día pero manteniendo su esencia original. El resultado es un entorno de lujo contemporáneo que al mismo tiempo conserva un carácter clásico y tradicional. En las áreas comunes, las paredes están decoradas con fotografías que muestran los cambios del hotel a lo largo de los años. Su restaurante, Lobo8, ofrece una reinterpretación de los platos clásicos españoles con un toque exótico, con platos como gazpacho de pera o ensalada de tomate con helado de aguacate.